Muchas personas piensan que con solo mirar una prueba de audición, se puede determinar fácilmente qué audífonos son los adecuados para ellas. Desafortunadamente, la prueba de audición es solo una consideración a la hora de determinar cuáles son los mejores audífonos para un paciente en particular. He desarrollado esta lista de los 6 factores clave que debe tener en cuenta al decidirse por un audífono.
Esta primera consideración vendrá determinada por la prueba de audición. Es imprescindible que elija un audífono que sea capaz de transmitir las frecuencias que requiere su prescripción para la pérdida auditiva. La configuración de su pérdida auditiva también determinará si se necesita o no un molde auditivo personalizado o el tamaño de la ventilación del molde auditivo.
La puntuación del habla en entornos ruidosos determinará qué tan bien puede escuchar y descifrar el discurso en entornos ruidosos. Un tipo de evaluación es la prueba rápida de SIN. Con el Quick SIN, podemos determinar qué tan bien oye en ambientes ruidosos y, si su puntuación es baja, necesitamos buscar audífonos que tengan la tecnología y los accesorios que necesita para solucionar este problema.
Incluso si encuentra el audífono perfecto para usted, es importante tener en cuenta cuántos profesionales de la salud auditiva pueden reparar o programar ese audífono. ¿Qué pasa si el audioprotesista al que acude se jubila? ¿O la empresa a la que le compraste los audífonos cierra sus negocios? ¿Qué pasa si te mudas al otro lado del país? Elegir un audífono que sea accesible para muchos profesionales de la salud auditiva es una consideración importante. Además, si es posible, evite los audífonos bloqueados con llave. Los audífonos que están bloqueados solo pueden ser programados o reparados por la empresa que los bloqueó.
Hay una lista extremadamente larga de preguntas que usted y su audioprotesista deben analizar antes de elegir audífonos. Deberán preguntarle sobre cualquier otro problema que pueda tener en relación con la visión, la destreza o la accesibilidad. Se le debe preguntar sobre su estilo de vida y el tipo de cosas que le gusta hacer. Debe hablar sobre su lugar de trabajo y el trabajo que desempeña, dónde pasa el rato y dónde vive. Todas estas preguntas le ayudarán a usted y a su audioprotesista a determinar qué características son necesarias para que usted reciba el máximo beneficio.
Su estilo de vida nos ayudará a determinar qué nivel de tecnología es mejor para usted. Contrariamente a la creencia popular, el nivel de tecnología que necesita no tiene que ver con la gravedad o la configuración de su pérdida auditiva. Los niveles más altos de tecnología lo harán siempre le brindan la mejor oportunidad de escuchar lo mejor que puede; sin embargo, no son la opción correcta para todos. Algunas personas no pueden permitirse el máximo nivel de tecnología y otras no suelen encontrarse en situaciones auditivas complejas que requieren niveles más altos de tecnología. Los niveles más bajos de tecnología pueden ofrecer grandes beneficios, pero son un poco menos eficaces en situaciones de escucha complicadas. Es importante tener en cuenta tu estilo de vida y no solo decidir que todo el mundo necesita el más alto nivel de tecnología.
Incluso si adquiere la pérdida auditiva perfecta que cumpla con todas las demás consideraciones anteriores, no obtendrá todos los beneficios de los audífonos si su proveedor de audición no sigue las mejores prácticas. Las mejores prácticas más importantes son una evaluación auditiva exhaustiva, una evaluación exhaustiva de las necesidades, las comprobaciones diagnósticas de los audífonos para garantizar su correcto funcionamiento, las mediciones del oído real y las medidas de validación para determinar los beneficios reales de los audífonos. El proveedor que elijas y las mejores prácticas que siga son tan importantes como los propios dispositivos.
Decidir qué audífonos comprar requiere algo más que una simple prueba de audición. Requiere una evaluación auditiva exhaustiva y una consideración cuidadosa de sus necesidades auditivas específicas. Recibo constantemente correos electrónicos en los que se me pide que me someta a una prueba de audición y que recomiende los mejores audífonos para esa persona en particular. El problema es que las pruebas auditivas son solo una pequeña parte de la ecuación. Ni siquiera los mejores audiólogos del mundo pueden recomendar adecuadamente el audífono perfecto basándose únicamente en los resultados de las pruebas de audición.
#1. Gravedad de la pérdida auditiva: el simple hecho es que necesita un audífono que sea capaz de proporcionar suficiente amplificación. Si tiene una pérdida auditiva grave, necesita un dispositivo que pueda producir una cantidad adecuada de sonido.
#2. Puntuación del habla en situaciones de ruido: es algo que debe añadirse a todas las evaluaciones auditivas. Una prueba común es la prueba Quick SIN (Speech-In-Noise). Esto indicará si los audífonos por sí solos le ayudarán a entender el habla en una situación ruidosa.
#3. Accesibilidad de una marca en particular: si tiene dificultades para ir a ver a un audioprotesista, puede beneficiarse de los dispositivos programados de forma remota. Es posible que no tengas acceso a una marca concreta en tu zona, por lo que es posible que esto restrinja tus opciones.
#4. Características importantes: hay una larga lista de preguntas que se le deben hacer a la hora de decidir qué funciones del audífono le proporcionarían las mayores ventajas. Esto no se puede hacer con solo mirar una prueba de audición. Es posible que lleve tiempo comprobar que se hace bien.
#5. Consideración del estilo de vida: recomendar un nivel tecnológico específico depende de tu estilo de vida. Esto no tiene nada que ver con la gravedad de su pérdida auditiva. Cuanto más complejos sean los entornos auditivos en los que se encuentre, más tecnología necesitará.
#6. ¿Su proveedor de cuidados auditivos sigue las «mejores prácticas»? - Incluso el audífono perfecto comprado y ajustado por un proveedor que no sigue las «mejores prácticas» no le proporcionará el máximo beneficio de ese audífono.
¿Qué son las «mejores prácticas»?
Básicamente, son los fundamentos que un audioprotesista debe seguir al recomendar, ajustar y programar un conjunto de audífonos.
Incluyen una larga lista de procedimientos que incluyen:
1. Evaluación audiológica integral
2. Evaluación exhaustiva de las necesidades
3. Controles de diagnóstico de los audífonos para garantizar que los audífonos cumplan con las especificaciones específicas
4. Medición real del oído para garantizar que los audífonos coincidan con la receta de pérdida auditiva del usuario
5. Medidas de los resultados de la validación para evaluar sus beneficios en el «mundo real»
Los audífonos pueden mejorar drásticamente su vida, pero solo si selecciona los dispositivos correctos.
Desafortunadamente, este proceso es más complejo de lo que la mayoría de la gente cree. No se puede hacer simplemente mirando una prueba de audición, pero se puede hacer muy bien si se tienen en cuenta todos estos factores.
Decidir qué audífonos comprar requiere algo más que una simple prueba de audición. Requiere una evaluación auditiva exhaustiva y una consideración cuidadosa de sus necesidades auditivas específicas. Recibo constantemente correos electrónicos en los que se me pide que me someta a una prueba de audición y que recomiende los mejores audífonos para esa persona en particular. El problema es que las pruebas auditivas son solo una pequeña parte de la ecuación. Ni siquiera los mejores audiólogos del mundo pueden recomendar adecuadamente el audífono perfecto basándose únicamente en los resultados de las pruebas de audición.
#1. Gravedad de la pérdida auditiva: el simple hecho es que necesita un audífono que sea capaz de proporcionar suficiente amplificación. Si tiene una pérdida auditiva grave, necesita un dispositivo que pueda producir una cantidad adecuada de sonido.
#2. Puntuación del habla en situaciones de ruido: es algo que debe añadirse a todas las evaluaciones auditivas. Una prueba común es la prueba Quick SIN (Speech-In-Noise). Esto indicará si los audífonos por sí solos le ayudarán a entender el habla en una situación ruidosa.
#3. Accesibilidad de una marca en particular: si tiene dificultades para ir a ver a un audioprotesista, puede beneficiarse de los dispositivos programados de forma remota. Es posible que no tengas acceso a una marca concreta en tu zona, por lo que es posible que esto restrinja tus opciones.
#4. Características importantes: hay una larga lista de preguntas que se le deben hacer a la hora de decidir qué funciones del audífono le proporcionarían las mayores ventajas. Esto no se puede hacer con solo mirar una prueba de audición. Es posible que lleve tiempo comprobar que se hace bien.
#5. Consideración del estilo de vida: recomendar un nivel tecnológico específico depende de tu estilo de vida. Esto no tiene nada que ver con la gravedad de su pérdida auditiva. Cuanto más complejos sean los entornos auditivos en los que se encuentre, más tecnología necesitará.
#6. ¿Su proveedor de cuidados auditivos sigue las «mejores prácticas»? - Incluso el audífono perfecto comprado y ajustado por un proveedor que no sigue las «mejores prácticas» no le proporcionará el máximo beneficio de ese audífono.
¿Qué son las «mejores prácticas»?
Básicamente, son los fundamentos que un audioprotesista debe seguir al recomendar, ajustar y programar un conjunto de audífonos.
Incluyen una larga lista de procedimientos que incluyen:
1. Evaluación audiológica integral
2. Evaluación exhaustiva de las necesidades
3. Controles de diagnóstico de los audífonos para garantizar que los audífonos cumplan con las especificaciones específicas
4. Medición real del oído para garantizar que los audífonos coincidan con la receta de pérdida auditiva del usuario
5. Medidas de los resultados de la validación para evaluar sus beneficios en el «mundo real»
Los audífonos pueden mejorar drásticamente su vida, pero solo si selecciona los dispositivos correctos.
Desafortunadamente, este proceso es más complejo de lo que la mayoría de la gente cree. No se puede hacer simplemente mirando una prueba de audición, pero se puede hacer muy bien si se tienen en cuenta todos estos factores.